Comunidades fuertes, bosques vivos
Hace 25 años, Marcedonio Cortave se convenció que el futuro del bosque petenero estaba ligado a sus comunidades. Su lucha por la inclusión social inició en una Guatemala recién salida de un conflicto militar y sin tradiciones democráticas, sin participación social, con poblaciones no organizadas, enfrentado a organizaciones empresariales con estrechas relaciones con el gobierno.
En los años noventas, Petén destacaba por la deforestación y el saqueo arqueológico. Los actores dialogando política pública eran Organizaciones No gubernamentales y proyectos de cooperación. En esta Guatemala, Cortave lideró la creación de la Asociación de Comunidades Forestales de Petén. Hoy, ACOFOP aglutina 30 organizaciones que han construido el experimento social forestal más exitoso del trópico global. Petén contiene 83% de las áreas protegidas del país; ACOFOP gestiona medio millón de hectáreas de ese bosque.
Ahora, estas comunidades hacen manejo integral de productos forestales maderables y no maderables, han incursionado en turismo y desarrollado una propuesta de mitigación al cambio climático (GUATECARBON) que es un modelo que ha concitado interés internacional. No es casual que durante los últimos dos años las áreas bajo gestión comunitaria repor
